A partir de 1935, Albert Camus (1913-1960) llevó un irregular diario de trabajo en el que tenían cabida apuntes de muy diversa índole: proyectos de novelas y piezas teatrales, reflexiones filosóficas y morales, notas de viajes y de lectura, descripciones de paisajes, citas literarias, conversaciones escuchadas en la calle, esbozos de diálogos dramáticos, esquemas argumentales, etc.
El contenido de estos Carnets muestra la génesis de buena parte de la obra del Premio Nobel de Literatura de 1957 -a través de fragmentos y desarrollos parciales- y su estilo de trabajo, ilustra el clima intelectual, moral y político de la época y permite vislumbrar las claves más personales de su labor creadora.