Tres grandes temas articulan la preocupación que erige estos textos poeticos el amor el dolor y la belleza sentimientos que se entrelazan codidianamente y provocan en nosotros la emoción diversa manifestada en gozo, estupor, tristeza, agitaciones del espíritu que se nutren tanto en el devenir de las incógnitas existenciales como en la exultante o en la sosegada recordación de los sitios y de las personas que ha conmovido nuestro espíritu. De todo ello, el propio poeta se hace eco y lo dice con voz de alto registro emocional, con la desgarrada conciencia de la fugacidad del tiempo vital.