Cuando no hay forma de saber cuáles serán las patologías dominantes del futuro, ni cuales los conocimientos y habilidades que serán necesarios para combatirlas. Permítaseme afirmar con toda claridad que encontrar respuesta pasa por la anticipación analizando los datos de los que disponemos y las experiencias ajenas. En ello nos jugamos buena parte de nuestro futuro.

Pretendemos enseñar no solo a recoger datos sino a interpretarlos. Se trata de saber cuáles son las mejores técnicas y hacer buenas indicaciones. Lo difícil es siempre, saber qué es lo que hay que hacer y no el hacerlo. Se trata de resolver problemas porque estos están correctamente enfocados.

Se trata de reflexionar, poner en marcha la maquinaria del análisis, discernir lo bueno de lo malo. En suma, plantearnos si lo que hacemos esta bien hecho o si podríamos mejorarlo.

Este libro, nace de la colaboración de distintos expertos de diferentes universidades españolas, profesores la mayoría de ellos. Con un objetivo claro: facilitar la labor de la nueva generación de profesionales de la salud y hacer más cómoda la convalecencia de sus pacientes.

Se presentan los conocimientos básicos y los recientes avances en la patología del aparato locomotor con un enfoque eminentemente práctico. Una de las finalidades es hacernos pensar adecuadamente ante los problemas que nos plantean los pacientes. Como decía el profesor de oficio Immanuel Kant "¡Sapere aude!" (¡Atrévete a saber!, ¡Atrévete a pensar!). Luego ya pasaremos a la acción.

Escrito por expertos con la consigna de que desvelaran su experiencia en la solución de los problemas cotidianos (qué complicaciones tienen y cómo las solucionan) exponiendo además los recientes avances, se ha buscado un enfoque didáctico a la vez que ameno y exhaustivo apoyándose en las evidencias.

Mucho ha sido el trabajo y el tiempo dedicado desde el nacimiento de la idea hasta resultado final. Permítaseme, como coordinador de este libro junto a mis compañeros y amigos Manel Llusá y Juan Redin, el atrevimiento de ser los únicos responsables de las carencias existentes.

Querido lector. ¿Qué hacer? y ¿qué no hacer?, mantener una estrategia coherente frente a los problemas que enfrentamos ha sido nuestro propósito. Si logramos transmitirte una actitud activa para mejorar tu entorno intelectual o laboral en provecho de tus pacientes y en el tuyo propio, nos daremos por satisfechos.

Recuerda que, para avanzar es necesario pausar la acción, replantearse los procedimientos y arriesgar. Solo así es posible progresar e iniciar nuevas líneas terapéuticas. Pero ten presente que cuando se trata de pacientes debe prevalecer el aforismo "primun non nocere".