Desde niños se nos enseñó que los nazis y los norteamericanos eran enemigos irreconciliables y que Adolf Hitler se suicidó con un disparo en la sien en abril de 1945# Este pequeño cuento moral, repetido una y otra vez, se instaló como una verdad absoluta, palmaria, incuestionable. Pero# ¿Y si las cosas no hubiesen sido así? ¿Y si un pacto tejido por los supuestos antagonistas hubiese facilitado la huida del Führer? Abel Basti lee todas y cada una de las entrelíneas de la historia, echa mano a documentos recientemente desclasificados, indaga en los rincones que la versión oficial prefirió dejar a oscuras y revisa los últimos días del nazismo bajo una luz diferente, para que surjan las evidencias de una fuga compleja y magníficamente planificada, que posibilitó un final muy distinto para Hitler: plácido, lejos del centro de la escena, apartado de juicios y condenas#y en el sur argentino. Una oscura trama de complicidades que, más de sesenta años después, impresiona y conmociona.