Posicionarse frente a un grupo es tener la oportunidad de dejar huella, es una invitación a ser referentes no sólo en Lo académico. Un maestro es un modelo posible, es quien tiene el enorme "poder" de mostrar caminos, señalar "cómos", alentar sueños, propiciar descubrimientos, resaltar fortalezas y ayudar a superar obstáculos. Este libro pretende enriquecer el día a día del aula a partir de una propuesta didáctica específica cuya base teórica es la educación emocional, la visión constructivista y sistémica del aprendizaje, los aportes de la Psicología Positiva y el enfoque que entiende las aulas como "heterogéneas". En estas páginas, el lector encontrará una invitación permanente a no abandonar nunca la reflexión acerca de lo que hacemos y decimos cuando estamos frente a un grupo de alumnos. Y, al mismo tiempo, el desafío de poner en práctica un dispositivo didáctico pensado para legitimar en las aulas la presencia de determinados valores desde la intencionalidad pedagógica.