Cuando la Cargill indica la necesidad de eliminar a la agricultura de subsistencia, apunta al enemigo, ya que busca vender materia prima, comprar y procesar productos agrícolas, vender alimentos y especular con todo el proceso productivo. En su larga experiencia, la corporación aprendió bien del camino a seguir, ya que lo primero es eliminarlos en su debilidad extrema, cuando ya no puedan comprar semillas y hayan perdido las suyas.

El papel explícito de los directores de las grandes corporaciones es "definir, modelar, reforzar los comportamientos deseados" además de "perseguir una política pública que facilite el éxito de Cargill". Y de hecho, sus directores regionales tienen como papel básico presentar a la corporación a las grandes figuras políticas, y esto lo han logrado plenamente si prestamos atención a las declaraciones de ex ministros y ex directores del MAG.