Está estructurado en cuatro partes: la primera describe la naturaleza de la actual crisis en la escuela y la sociedad de EE. UU; la segunda intenta presentar las luchas cotidianas que enfrentan maestros y estudiantes de una escuela de barrio pobre; la tercera parte ofrece un panorama general de la corriente de la pedagogía crítica y la cuarta parte presenta categorías adicionales y perspectivas teóricas de la tradición crítica y concluye con un corto ensayo sobre el papel del maestro.