La prisión preventiva ha ganado terreno en la medida que los jueces sienten temor de ser investigados penal o disciplinariamente por tomar decisiones libertarias. Ese temor de los funcionarios no se deriva a experiencias propias, sino de cómo perciben las prácticas de algunos de sus colegas. Así, resulta imperioso revisar la protección de otros poderes públicos y de la Judicatura misma.

En el plano ético es urgente generar espacios de reflexión, orientados a que jueces, fiscales y defensores tomen mayor conciencia de la grave afectación de derechos fundamentales asociados a las medidas cautelares personales, y de la consecuente obligación de realizar todos los esfuerzos posibles para evitar que el Estado, en el ámbito de la actuación penal, inflija daños innecesarios o desproporcionados.

Tema novedoso, rico en análisis jurisprudencial y respecto a principios tales como: legalidad, proporcionalidad y presunción de inocencia. El libro alude a un problema importante, el cual desarrollan los autores acogiendo doctrina nacional y de otros países. Un gran aporte al derecho colombiano.