Cada día se crean nuevas necesidades y junto con ellas nuevos satisfactores; aparentemente estos beneficios aumentan la expectativa de vida, pero sólo se incrementa el despilfarro y el establecimiento de más industrias y servicios que generan más residuos, los cuales, dependiendo de su peligrosidad, afectan en mayor o menor grado el aire, el agua y los suelos. Todo esto deteriora el proceso de vida en el planeta, incluyendo la vida misma del hombre. La peligrosidad de un residuo depende de su composición, cuantía y disponibilidad.

Composición. Un residuo es peligroso cuando libera energía, dispersa sustancias que alteran el metabolismo o contiene agentes capaces de producir enfermedad.

Cantidad. Para que un residuo biológico-infeccioso pueda representar un peligro tiene que estar en grandes cantidades, pues para que un patógeno infecte a una persona necesita estar en cierta concentración y además ser capaz de producir daño.

Disponibilidad. Todo residuo peligroso requiere estar disponible, es decir, debe poder transportarse por aire o agua para interactuar con los seres vivos.

En esta obra se pretende orientar a todo el personal de salud para que pueda manejar con seguridad los RPBI y los pueda desechar al menor costo y con la mayor seguridad posibles, de modo que causen el menor daño.