Santo ya! "¡Santo súbito!" fue la respuesta esperada. El clamor de muchos que pedían la beatificación del papa Juan Pablo II, tras su fallecimiento en 2005, fue concedido. El mundo de hoy necesita un guía, porque difícil de transitar. Y, Jaun Pablo II, Karol Josef Wojtyla, manantial espiritual de fe, de esperanza y claridad, es el guía que el mundo necesita. Su vida y su pontificado se caracterizaron por su compasión hacia los que sufren todo tipo de enfermedad, por sus encuentros con los pueblos más necesitados de justicia y paz..