Tendremos que prepararnos a reconocer ?a través de un recorrido en absoluto asequible por una vía lineal (llámese ?cronológica? o ?lógica?), a través de una lectura sin centro? un retrato o una imagen del bebé y del niño sensiblemente diverso al de la narrativa psicoanalítica consagrada. Además, una manera nueva de conectar a ese bebé y a ese niño con la problemática filosófica establecida, en la medida que esa metafísica siempre excluyó radicalmente al niño de toda cuestión relativa al ser. Preclusión con muchas consecuencias que Winnicott recoge.?
Partiendo de esta premisa, Ricardo Rodulfo ofrece con este nuevo libro una vía de acceso diferente a un autor ya transitado ?pero no siempre bien comprendido? por la literatura psicoanalítica tradicional. Retomando uno por uno sus conceptos, el self, el falso self, lo transicional y sus derivaciones, los contrapone y los hace dialogar con las lecturas más canónicas de estas nociones, abriendo con ello un nuevo espacio de reflexión y de posibilidades al lector. Dueño de un estilo personal, Rodulfo sabe combinar muy bien el pensamiento teórico, la experiencia docente y la inconfundible marca de una clínica, para proponer una lectura, eje fundamental del libro, que haga repensar la localización de Winnicott en el presente del psicoanálisis.