En yo el Supremo augusto roa basto retrato con suma complejidad historica y simbolica el mundo irreal de Jose Gaspar Rodriguez de Francia, quien goberno con mano de hierro el Paraguay entre 1814 y 1840. El es la figura totemica de la novela, un hombre dedicado a la redaccion de un interminable documento publico, la circular perpetua y cuyo contrapunto encontramos en patiño, su no siempre vecinos fructifica en un torrente oral y textual que aspira a instituirse como poder obsoluto encarnado en el verbo unico.