Thomas Alva Edison (Ohio, 1847 -New Jersey, 1931) patentó la lámpara incandescente, el fonógrafo, el kinetoscopio y más de un millar de inventos. Fue además una personalidad científica singular, habilísimo mecánico, eficiente administrador, incansable hacedor de negocios.Hacia 1920 ya había aportado más de 15.000 millones de dólares a la riqueza de su país.

Se manejó dentro del capitalismo comercial, no como un sabio aristocrático embebido en la ciencia pura sino como un propulsor de aparatos e instrumentos acordes con el desarrollo industrial.Edison, el hombre de los mil inventos presenta a esta figura paradigmática en el marco de sus creaciones y de su coyuntura económica.