Este libro ofrece un marco apropiado para que cualquier docente posea la formación necesaria que le permita hacer efectiva la IA a su servicio, a sus órdenes; que le apoye en tareas mecánicas, de las que siempre se intenta huir, para dedicarse a educar en el más amplio y profundo sentido de la palabra: alimentar para el crecimiento y extraer todo lo que la persona posee en su interior. Educare y educere serán los principios que regirán la educación futura y que no son reemplazables por ningún tipo de IA. La educación es comunicación humana, interacción mutua y perfeccionamiento permanente. Muchas de las tareas que ahora realizamos podrían ser realizadas por robots magníficamente, mientras que los docentes se dedican a profundizar en el desarrollo más humanista del ser.